Los últimos momentos fueron muy tristes ya que para nosotros se acaba en Barajas nuestro "encuentro afortunado", aunque lo seguimos manteniendo en los sentimientos. Abrazos masivos, lágrimas, fotos, mensajes de "nos veremos pronto" etc...
Algunas fotos de la despedida:
Recuerdo que el domingo que empezó la misión, Helena, una de las coordinadoras, nos digo que a partir de ese momento nos iba a "cambiar la vida" y que ya nada sería como antes. Y así es. La experiencia que todos hemos vivido ha sido única y puede que irrepetible. Desde el sábado 17 de abril, todos los días me acuerdo de cada momento del viaje y me rio de los buenos recuerdos que tengo.
Fue una corta semana pero muy intensa, no era consciente de que el tiempo pasara tan rápido y que terminaría pronto. Ni el cansancio de dormir muy poco me pasó factura, disfruté este viaje todo lo que pude y de cada segundo.
Tal vez no hablé con todos embajadores y ni siquera pueda que conozca a la mayoría pero entre nosotros existe una conexión especial y única: el amor por nuestra tierra y la suerte de haber compartido esta misión juntos. No encuentro las palabras exactas para describir sensación que he recibido del viaje y que me han transmitido otros embajadores.
Uno de los sentimientos más bonitos y que nunca antes había sentido era hacer feliz a las personas de esta forma: ver a las familias con los niños contentos por la cantidad de actividades que iban a realizar en Canarias, los mayores super ilusionados con el viaje etc...
GRACIAS POR ESTE ENCUENTRO AFORTUNADO
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