
El miércoles y jueves en
Vitoria fueron unos días muy intensos, en los que se demostraría nuestra labor como embajadores.
El miércoles 14 de abril nos fuimos al centro de
Vitoria, donde
buscábamos a gente dispuesto a dejarlo todo y venirse a Canarias. Por la plaza de la Virgen Blanca y la calle principal Dato, íbamos dando globos a niños y no tan niños que nos los pedían. Por la mañana vinieron al hotel en el que nos
hospedábamos medios de
comunicación para entrevistarnos. De diez a diez estuvimos en la calle y sólo descansamos dos horas al mediodía cuando nos vino a visitar nuestro coordinador
Chema. Mucha gente ya nos conocía porque nos había visto en televisión, en Internet y escuchado en la radio.
La verdad es que

nos costó un poco encontrar gente que cumpliera con el perfil de
Water Sports, es decir, que realizara deportes acuáticos como
submarinismo,
windsurf,
surf etc... A pesar de esto, dejamos bastantes
flyers en bares, tiendas y demás por si conocían a alguien. De esta forma, mucha gente nos llamó para preguntarnos sobre el viaje.
Al mediodía vino
Chema, comimos
pintxos e hicimos un poquito de turismo por el casco viejo de
Vitoria (muy bonito,por cierto) y nos contó algunas cosas curiosas sobre el País Vasco.
A la tarde volvimos a la acción, con más globos ( los niños nos
"atracaban" en cada esquina). Pedimos información en la Oficina de Turismo sobre lugares donde podríamos encontrar a un posible perfil. Nos hablaron de un pantano a las afueras de
Vitoria, pero no teníamos medios para
trasladarnos hasta allí.
A las diez de la noche terminamos nuestra "jornada" y volvimos a irnos de
pintxos, pero en ningún momento dejamos de buscar a gente ( incluso en los bares donde comíamos preguntábamos a la gente).

El jueves 15 de abril sería el día decisivo. Desde las 10 de la mañana comenzamos a recibir gente en el
hall del hotel. En ocasiones, los candidatos que tenían cita venían con amigos suyos para que también los entrevistáramos o los conocidos de los
trabajadores del hotel, como fue el caso del cocinero, avisaban a gente para conseguir el viaje . En total hicimos diez entrevistas a los que les hicimos preguntas de todo tipo, e incluso les hicimos bailar, como fue el caso de nuestro ganador que nos hizo el
"baile ruso".
Agradecímos mucho la visita de una mujer que se había enterado por la radio que
estábamos en el Hotel
Barceló de
Gasteiz, y nos contó que sus hijas vivían en
Lanzarote y que cada vez que podía iba a visitarlas porque le encantaba Canarias.
A las 8, era la hora de llamar al ganador y comunicarle la noticia que le iba a alegrar todo el día y toda la semana: ¡se venía una semana a todas las islas de
Canarias con todos los gastos pagados para practicar deportes de agua! El ganador fue
Iñigo, que por casualidades vino al
casting por casualidad, enterándose de la entrevista unas horas antes, por lo que la suerte llega cuando menos te lo esperas. Es un chico que ha viajado mucho por el mundo ya que practica deportes como
surf,
submarinismo,
snowboard etc...

Los jueves en
Vitoria se hace el conocido
"pintxo-pote", en el casco viejo de la ciudad, donde los bares se llenan de juventud que comen y beben por muy poco dinero. Por tal razón, salimos con el ganador por diferentes bares en los que conocimos a la "
Vitoria de noche" y saboreamos los magníficos
pintxos.
Esta era la última noche en la capital vasca, ya que el viernes a las 10 volvíamos a Madrid para
reecontrarnos con todo el grupo de embajadores.
Entre tanto,
Regina y yo nos conocíamos cada vez más y hacíamos un equipo genial ya que nos
complementábamos a la perfección a la hora de entrevistar a los candidatos, preguntar a la gente a la calle etc...¡Incluso teníamos los mismos gustos!